Pedro Jiménez Rodríguez
Al arranque de las campañas electorales, muy pocos creen posible que el PRI y sus candidatos podrán revertir las cosas y ganar, no sólo José Antonio Meade la
Al arranque de las campañas electorales, muy pocos creen posible que el PRI y sus candidatos podrán revertir las cosas y ganar, no sólo José Antonio Meade la presidencia, sino los otros nueve aspirantes a un gobernar un estado y la ciudad de México*** Es que la mayoría de las encuestas, maiceadas o no, ubican a los abanderados del PRI como victimas propicias para la derrota, no sólo ro el desprestigio en que se encuentra el otrora partidazo invencible, sino por el mal gobierno que le atribuyen al presidente Enrique Peña Nieto y a otros gobernantes que ya entregaron el gobierno a sus contrincantes, o que están por entregarlo después del 1 de julio*** Lo cierto es que los priístas están en arenas movedizas y mientras más se mueven, más se hunden, pues nadie les cree lo que dicen, ni siquiera las ofertas de que ahora sui van a cambiar, que van a combatir la corrupción, que no van a robar, que nos e van a enriquecer, que no van a pactar con el crimen organizado y que van a hacer lo que hasta ahora no han hecho para apoyar a los que menos tienen o los que han perdido todo, menos la vida, a consecuencia de lo0s desastres naturales*** Lo peor del caso es que en el PRI de Enrique Ochoa Reza ya no hay líderes, pero tampoco tropa, activistas que salgan las calles, o al campo a convencer a los votantes de que si pueden y saben hacer las coas bien. Y para colmo al candidato priísta a la presidencia, José Antonio Meade, le impusieron un aparato burocrático con más de un centenar de promotores, coordinadores, directores, jefes y cachanchanes, que encabezados por Aurelio Nuño Mayer, no hacen nada bueno, pero cobran como si ya estuvieran en el gobierno*** Tal vez en el PRI ya tienen un plan bien elaborado, para sacar al buey de la barranca, pero hasta ahora no se ve como puedan hacerlo, a pesar de que en los spots que se supone son gratuitos, sale un Meade sonriente y confiado, anunciado cosas que en otros tiempos han sido bien acogidas por la sociedad, pero que en la actualidad no consiguen entusiasmar a nadie. Ya veremos*** Por cierto, en el estado de Morelos ya se prepara un nuevo escándalo para envolver a Cuauhtémoc Blanco, el ex futbolista profesional, ídolo de multitudes que ya se creyó que puede gobernar este Estado, montado en el Peje López Obrador y aprovechando el mal gobierno y desprestigio de Graco Ramírez, quien hace seis años se vendió como la solución a todos los problemas de los morelenses y hoy lo ven como lo que es, un político de medio pelo que se enriqueció y enloqueció, a grado tal que pretende que su hijastro Rodrigo Gayoso puede y debe su-cederlo en el gobierno, no sólo para que le cubra las espaldas y le tape todas sus pillerías, sino para mantener una especie del poder tras del trono. Ah, pero les decía que están preparándole la cama a Cuauhtémoc Blanco, quien está acusado de falsificación de documentos y fraude electoral, por lo que esta más cerca de la cárcel que de llegar al palacio de gobierno. Dicen los que saben que a Cuauhtémoc lo van a dejar hacer campaña y faltando un mes para el primero de julio, le van a sacar los trapitos al sol y lo van a enjuiciar, con lo que quedará invalidado para seguir en la contienda electoral y tendrá que ceder su lugar a Rabindranath Salazar, el verdadero candidato de Morena, pues hizo todo el trabajo de campo previo al destape de Cuauhtémoc Blanco, quien a pesar de todo es el preferido del Tiñe, como le llaman al pueblo los cubanos. Ya veremos.
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