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Thu, Apr

*René Juárez, relevo contra corriente

Partidos politicos
Zona Sísmica

Por Marco Polo Aguilar

*René Juárez, relevo contra corriente

*Manotazo de Meade y cambio de ruta

*Respuesta del senador Albarrán a Margarita

Aunque la lógica más elemental dicta que nadie cambia de caballo a la mitad del río, hay situaciones de emergencia que obligan a ir contra corriente. Y en el caso
Zona Sísmica

Por Marco Polo Aguilar

*René Juárez, relevo contra corriente

*Manotazo de Meade y cambio de ruta

*Respuesta del senador Albarrán a Margarita

Aunque la lógica más elemental dicta que nadie cambia de caballo a la mitad del río, hay situaciones de emergencia que obligan a ir contra corriente. Y en el caso de la dirigencia nacional del PRI, la contingencia no podía ser mayor.

Cuentan los enterados, que a unos días de que en la cúpula del poder se decidiera la postulación de José Antonio Meade como candidato a la presidencia, el nombre de Miguel Ángel Osorio Chong aún sonaba fuerte y el canciller Luis Videgaray apuró los ajustes de última hora para el destape del aún secretario de Hacienda, convocando a una reunión de emergencia a Enrique Ochoa Reza, presidente del CEN del PRI.

El objetivo de Videgaray era hacer saber al dirigente nacional del PRI que la nominación de Pepe Meade iba a requerir también de un cambio en la presidencia priista, por lo que debía apurar sus maletas.

No obstante el señalamiento, Ochoa aparentó disciplinarse al llamado, pero fue directo a Los Pinos para expresar al presidente Peña Nieto el inconveniente de apurar un cambio en el CEN del PRI, cuando los sondeos de opinión daban una amplia ventaja a Andrés Manuel López Obrador.

Nadie sabe cuáles fueron los argumentos con los que Enrique Ochoa logró convencer al presidente Peña de no relevarlo en forma intempestiva, pero lo que si se supo, es que el mandatario logró que el poderoso secretario de Relaciones Exteriores aceptara que un cambio súbito en la dirigencia del PRI, haría que la candidatura de Meade naciera con debilidad prematura.

Al cabo de tres meses de precampaña, de una larga intercampaña y a un mes de campaña abierta, la realidad ha magnificado este error de decisión y como era de esperarse, fue el propio Pepe Meade quien decidió cortar de tajo con una dirigencia que, lejos de apuntalar su candidatura, parecía minarla más conforme el reloj de arena de la campaña se vaciaba.

Políticos cercanos al presidente Peña sostienen además que este cambio es parte del karma de una decisión postergada en forma maquiavélica por el inquilino de Los Pinos, quien de madrugada y vía telefónica notificó a Osorio Chong que él no sería el candidato a la presidencia.

Así, esta trama subterránea vino intensificando su efecto pernicioso, jugando las contras a Meade, quien también ha resultado ser víctima de la poca experiencia de su coordinador de campaña Aurelio Nuño.

La llegada de René Juárez Cisneros a la dirigencia nacional del PRI se da en un contexto en el que el principal operador de Osorio Chong entra al relevo, cuando la labor en la campaña de Meade es cuesta abajo y las encuestas más optimistas ponen a MORENA al menos a 20 puntos porcentuales de distancia y al Frente por México a 10 de diferencia.

La dirigencia nacional del PRI no tiene más alternativa que hacer un llamado a cerrar filas y pasar verdaderamente a la ofensiva para un repunte inobjetable de Meade en las dos últimas entradas de la contienda, y en esta labor, el peso real del trabajo de campo que el equipo de Osorio Chong realizó desde la Secretaría de Gobernación, debe traducirse en un factor real de peso para el repunte en la candidatura y la campaña de José Antonio Meade.

Los más enterados han comentado subrepticiamente: “quien iba a decir a Peña Nieto que sería el propio Osorio Chong, el que fue obligado a marcharse por la puerta trasera, quien tendría que rescatar de la debacle a su propio proyecto fallido”.

Y mientras estas historias de pasillo se dirimen, lo realmente importante es que la llegada de René Juárez Cisneros, un “duro” a la dirigencia nacional del PRI, marcan que esa era la línea necesaria para contener el antipriismo y el avance de MORENA, y que mantener a Ochoa Reza frente a la elección más complicada del PRI en su historia, fue una decisión equivocada.

René Juárez llega al PRI nacional sin tiempo para pausas, sin espacio para lastres y sin oportunidad para el fracaso. En el camino deben quedar fuera los que apostaron a la retórica por sobre los hechos; los que más allá del trabajo de base improvisaron ocurrencias pretendiendo así contrarrestar las gracejadas y las ocurrencias de sus contrincantes y los que aún creen que el ejercicio del poder es una cuestión patrimonialista que se reproduce a sí misma sin trabajo real de por medio.

Las herramientas que aún quedan a la mano de René Juárez y su equipo, son, además del llamado “voto duro” el apoyo corporativo que el grupo en el poder aún conserva y una “reserva de votos” en el segmento de los indecisos que pueden llevar su dura travesía a buen puerto.

Pero para que la estrategia funcione, deben convencer fortaleciendo a un candidato que se ha mantenido en el limbo de la propuesta flat y de la beligerancia nula.

Lo que esta etapa final de la campaña exigirá del candidato priista y su partido, es su distanciamiento real del grupo en el poder, un golpe autocrítico de timón, pero sobre todo, una propuesta disruptiva y asequible que deje de crecer al adversario al mantenerlo en el centro de su ataque, por encima de las propuestas que el ciudadano requiere respondan realmente a sus expectativas.

Hoy domingo al mediodía, en una fecha inusual, el candidato presidencial José Antonio Meade Kuribreña y el presidente del CEN del PRI, René Juárez Cisneros pusieron, en práctica un encuentro llamado “Avanzando Juntos”, al desbordar a miles de militantes y simpatizantes priistas en la explanada de la sede nacional del PRI, para lanzar un nuevo plan y crear un frente nacional para detener a los delanteros en las encuestas o bien fortalecer al priismo del país.

Con el grito de batalla de “Pepe presidente”, el candidato José Antonio Meade hizo un público reconocimiento a Juárez Cisneros como dirigente nacional del partido, ya que “en estos 56 días vamos a demostrar de que está hecho el PRI. Vamos a ver a una dirigencia que está concentrada en dar rumbo a todos”.

“Cuando en el priismo sabemos que está en juego el futuro de la nación, salimos a dar la batalla”, dijo un Meade sonriente, a quien ya cambiaron el saco negro por la chamarra roja, emblemática del priismo nacional.

En breve se sabrá si la llegada de René Juárez Cisneros a la sede priista fue muy tardía o se simplemente se sacó la rifa del tigre, pero hoy el chico de La Laja dio un golpe de timón en el PRI, al que muchos tendrán que ajustarse entre gobernadores, presidentes municipales, senadores, diputados y líderes del partido. ¿Tú qué piensas amable lector?

Movimientos telúricos…Qué la candidata independiente a la presidencia de la República, Margarita Zavala no supo ni en donde se metió por criticar la difícil situación por la que atraviesa el estado de Guerrero y una de ellas muy fue la del senador Esteban Albarrán Mendoza, recientemente designado vocero de PRI del estado de Guerrero y quien le dijo: “@Mzavalagc, el peor momento de Guerrero fue cuando tú y tu esposo gobernaron México, los problemas que vivimos son la herencia que nos dejaron y no nos hemos podido sacudir”…por cierto, Albarrán Mendoza es senador por ser suplente de René Juárez Cisneros, quien se fue a la Secretaría de Gobernación como subsecretario de Gobierno y ahora fue nominado presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PRI...”es un merecido reconocimiento a su experiencia y capacidad política para conciliar intereses y unir voluntades”, dijo el senador Albarrán cuando nombraron a Juárez Cisneros dirigente nacional del PRI…This email address is being protected from spambots. You need JavaScript enabled to view it.



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