El famoso “chucky” tiene la ambición de ser presidente, como la tuvo su mentor Manuel Camacho Solís
· El canciller tiene puntos negros en su vida política; sobresale la desviación millonaria en la línea 12 del Metro.
Marcelo Luis Ebrard Casaubon, es la figura central de la 4T, por su experiencia en la política ha suplantado las tareas de otros miembros del gabinete, como la secretaria de Gobernación, de Economía, y de Salud, además de otras dependencias.
Es, de facto, un auténtico jefe de gabinete; es el consentido del “señor presidente”, Andrés Manuel López Obrador.
Uno de sus más recientes acuerdos fue el haber logrado un convenio con la asociación de hospitales privados a fin de que apoyen al gobierno de la República, en la lucha con el coronavirus.
Su capacidad y experiencia de maniobra lo ha colocado a la cabeza en la lucha por la muy adelantada sucesión.
Ebrard siempre ha tenido la insana obsesión de ser presidente de los Estados Unidos Mexicanos.
Ambición que también la tuvo su mentor, Manuel Camacho Solís, que no fue bendecido con la candidatura.
Marcelo tiene esa idea desde el sexenio de Carlos Salinas de Gortari, en esa época era secretario de gobierno del DDF.
Pero el señor canciller Ebrard siempre ha estado sometido a Andrés Manuel López Obrador. Ese intercambio de apoyos entre ambos data desde 2000.
La relación se fortaleció en 2012. Ebrard le cedió su la candidatura al Peje, que competía por el Partido de la Revolución Democrática, partido al que traicionó.
Marcelo entonces jefe del gobierno de la ciudad fue candidato por el partido Verde. Una encuesta entre el Peje y Chelito, resolvió a favor de Marcelo. Pero éste le entregó su triunfo al tabasqueño.
Con su cargo de secretario de gobierno del entonces Departamento del Distrito Federal, le correspondió entregar un portafolio poco mas de 35 millones de pesos al Peje, como recompensa por “por desgaste físico”, por despejar la Plaza de la Constitución era 2006
Además de contratar 200 autobuses de lujo para transportar a los tabasqueño acampados en la plancha del Zócalo, a su lugar de origen, es decir hasta la ciudad de Villahermosa, Tabasco.
El líder de la “honestidad valiente” entendió la fórmula para hacerse de millonarios recursos con sus presiones al gobierno federal: bloques a pozos petroleros, de carreteras, o plantones en el Paseo de la reforma.
Marcelo tiene mucha experiencia en las lides de gobierno; se disfrazó de “guerrillero” para apoyar a Camacho Solís en su tarea de “pacificador” del Ejercito Zapatista de Liberación Nacional, en Chiapas.
Su paso por la Jefatura de Gobierno del Distrito Federal, fue gracias a la “generosidad del Peje”, su labor no fue del todo eficiente.
Permitió la instalación de cientos de vendedores ambulantes, sobre todo de piratería; es un consumado demagogo, transformó a la capital de la República en un verdadero cochinero, fue de las más contaminadas y en una de las más peligrosas de México.
Robos y asaltos a mano armada, secuestros “exprés”, proliferación de tienditas de narcomenudeo, y trabajó con funcionarios corruptos bajo su mando.
Como titular de la Secretaría de Seguridad Pública, fue cesado de ese importante y jugoso cargo fue su forma pusilánime de comportarse
Su falta de decisión permitió el linchamiento de tres agentes federales en la delegación de Tláhuac.
El entonces su jefe, el presidente Vicente Fox lo cesó en forma fulminante.
El Peje, como titular de gobierno de la ciudad, lo acogió de inmediato y lo nombró secretario de Desarrollo Social.
En esa condición promovió el matrimonio entre personas del mismo sexo
Fernando uno de sus hermanos, murió de una penosa y larga enfermedad, se dice que fue de VIH.
Otro de sus hermanos, Enrique Camilo, fue acusado ante el ministerio público por diversos delitos, -entre ellos el fraude- para no ser detenido por la entonces Procuradora General de la República, tramitó y obtuvo la protección de la justicia, por medio de un amparo,
La carpeta de investigación tiene el folio SEIDF/CGI/013/2015, el hermano del ahora poderoso funcionario en esta era del Peje.
También la carpeta de investigación duerme el sueño de los justos o de los injustos.
Otro caso relacionado con el fraterno es lo relacionado con la compra de la residencia ´presuntamente propiedad del canciller, ubicada en la Plaza Río de Janeiro
Al respecto, Marcelo como regente, no desaprovechó su cargo, y compró a precio de venta de garaje la casona en cuestión en Plaza Río de Janeiro 46, en la colonia Roma. Fue el motivo de la investigación de su fraterno Enrique
Al asunto se le dio carpetazo
. ¡Qué bonita familia!
Con todas esas “recomendaciones”, Marcelo Ebrard obtuvo el título de “el mejor alcalde del mundo” tal vez por asunto del desvió de por lo menos 17 mil millones de pesos, en la construcción de la línea 12 del Metro, ahora conocida como la “línea de oro”.
De todo esto, es decir como jefe del gobierno de la ciudad, de la concesión de las grúas, de anuncios en el Metrobús, y de sus “ganancias”, al frente de la secretaría de Seguridad Pública, Marcelo Ebrard Casaubón, señaló que no tiene ni un peso.
No ha revelado de que vivió en su largo exilio en la ciudad Lux, es decir en una de las ciudades más caras del mundo, como es París.
Ahora, en el sexenio de la cuarta transformación, al actual secretario de Relaciones Exteriores, ya se le conoce -y parece que le gusta el título- como el vicepresidente de México.
El “presidente” de México y de la 4T, es decir el Peje, debe estar atento, tiene que vigilar y evitar que Marcelo siga creciendo.
El canciller tiene con qué: experiencia, inteligencia, habilidad y presencia.
En los pasillos y en centros de reunión de políticos, ya se le menciona como uno de los sucesores a la “Silla del Águila” a pesar de que AMLO todavía no cumple dos años en el cargo.
Tal vez porque miles o tal vez millones de ciudadanos, rechazan la forma de “gobernar” del zafio tabasqueño
El lema mil veces repetido en esta etapa, y que es una de las mentiras más frecuentes es:
No Mentir, no Robar y no Traicionar.
Tanto Andrés Manuel como Marcelo Luis practican las tres cosas con consumada maestría.
Es la transformación que pretende el presidente Andrés Manuel, que tiene a la Nación en la ruina, enferma y arrepentida de haberlo llevado al cargo más importante de México, la Presidencia de México cargo que le quedó demasiado grande.
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