A dos años de gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador, ha demostrado a las y los mexicanos que su Administración no es diferente a los gobiernos del pasado
El Gobierno Federal no regresó el Ejército a los cuarteles, al contrario, ampliaron su presupuesto y sus funciones en las calles, los puertos y las obras públicas; y la Guardia Nacional que tendría un mando civil, terminó por ser un instrumento más de las Fuerzas Armadas.
El Presidente ha sido indolente con las víctimas del crimen organizado o familiares de personas desaparecidas, pero solidario con los criminales como “El Chapo” Guzmán Loera, a quien le externó su conmoción por su cadena perpetua.
A pesar del lema “abrazos, no balazos”, hoy, el gobierno de López Obrador acumula 59,451 homicidios y 27 mil 871 personas desaparecidas: en promedio, 97 personas son asesinadas todos los días.
A la postre, la frase del Presidente sobre que “la corrupción se barre como las escaleras, de arriba para abajo”, terminó como una anécdota o eslogan de campaña y nada más. Basta recordar cómo la Secretaría de la Función Pública eximió a Manuel Bartlett, con serias denuncias en su contra por propiedades inmobiliarias no declaradas; o el manejo que se ha dado a los video escándalos de Pío López Obrador y David León, que exhiben la red de corrupción utilizada por Morena para financiar la campaña política de 2018.
La mayoría de Morena en el Cámara de Diputados no actúa diferente a otras legislaturas, actúa como una ventanilla del Poder Ejecutivo. Con “lealtad ciega”, como prefiere el Presidente, los diputados de Morena y sus aliados, no mueven ni una coma a las propuestas del Ejecutivo, aunque eso signifique recortar el presupuesto para seguridad y salud de las entidades, o trunque el desarrollo de la ciencia, la cultura o el deporte en el país.
Aunque el Gobierno Federal insiste en que la crisis económica en México es derivada de la pandemia del Covid-19, la realidad es que la economía estaba en recesión mucho antes de que se registrara el primer mexicano contagiado. Es evidente el estancamiento: en el segundo trimestre de 2019, la economía se contrajo 0.9 según datos del INEGI, en el primer trimestre de 2020 siguió disminuyendo a 1.4, y para el segundo trimestre de 2020 el PIB ya había decrecido 18.7.
No hubo tampoco crecimiento en la generación de empleos, ya que en los primeros nueve meses de 2019 se crearon 488 mil empleos formales, el 63% de los empleos generados en el mismo periodo de 2018. Para 2020 ya habíamos perdido más de 12 millones de empleos.
La falta y escasez de medicinas continúa pues el Gobierno Federal centralizó las compras de medicamento y excluyó a la industria de distribución en el abastecimiento. Si el abasto de medicamentos estaba por debajo del 30% ahora se encuentra en 70%.
De 2018 a la fecha ha habido un recorte de 16% en los programas de atención al cáncer de mama y de 15% para las acciones relacionadas con la salud sexual y reproductiva.
Aunado a ello, desaparecieron las estancias infantiles, recortando prácticamente la mitad del presupuesto (43%) destinado y afectando a 9 mil 565 de ellas. Este recorte es una medida regresiva a los derechos de las mujeres, pues las obliga a salir del ámbito público al ámbito privado para realizar labores de cuidado. El Gobierno no está con ellas.
El Gobierno Federal sigue apostándole a un modelo de destrucción del medio ambiente, tan solo en 2021, todos los organismos de la SEMARNAT padecerán recortes que van del 3%, en el caso de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegida; del 8.9% al Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático; del 9% para la Procuraduría ambiental; y hasta del 11% para la Comisión Nacional Forestal. Mientras que invierte en proyectos perjudiciales para el medio ambiente, como el Tren Maya, la refinería Dos Bocas y el aeropuerto Felipe Ángeles. Este Gobierno, en vez de promover el desarrollo de energías limpias, las ha frenado.
Tenemos que señalar que uno de los compromisos del Presidente fue el de “no recurrir a métodos de extracción que afecten la naturaleza” no obstante en el PEF 2021, el gobierno contempla dos proyectos de exploración y producción de Pemex que implican uso de fracking.
México no se equivocó al votar por un cambio en 2018, sin embargo, el Gobierno Federal no ha estado a la altura de sus promesas y de los retos que hoy enfrenta el país. Movimiento Ciudadano se comprometió a respaldar los esfuerzos del gobierno para transformar al Estado y la vida pública, pero la falta de resultados revela los límites de esta administración. BLOG COMMENTS POWERED BY DISQUS