DIARIO LEGISLATIVO
*With money the dog dances
Pedro Jiménez Rodríguez
“Un político pobre, es un pobre político”.
Obviamente la frase no es mía, es del profesor Carlos Hank González
*With money the dog dances
Pedro Jiménez Rodríguez
“Un político pobre, es un pobre político”.
Obviamente la frase no es mía, es del profesor Carlos Hank González
(q.e.p.d.), y la dijo hace más o menos medio siglo.
Sin embargo, hoy en día sigue vigente, porque solo los políticos que
han alcanzado un status económico privilegiado, pueden llegar a la
cima del poder.
Esa es una verdad sine qua non.
Por eso ahora que esta desatada en Morena la lucha por la
candidatura del presidencial para el 2024, cobra vigencia la máxima
hankista, pues como decían los merolicos en las plazas públicas, en el
siglo pasado, sin dinero, no baila el perro.
Por eso es igual de importante llegar a la lucha final ocupando un
cargo de importancia, que tener el aprecio del Presidente de la
República.
No por nada solamente hay cuatro gigantes en la contienda por la
candidatura: Claudia Sheinbaum, jefa del gobierno de la Ciudad de
México; Marcelo Ebrard, Secretario de Relaciones Exteriores; Adán
Augusto López, Secretario de Gobernación, y Ricardo Monreal, líder
del Senado de la República.
Los cuatro tienen su guardadito y algunos apoyos externos que les
siguen ofreciendo, por si se ofrece, pero sobre todo, tienen a la mano
recursos económicos y materiales, que están utilizando
discrecionalmente.
Ninguno de ellos es pobre, ni vive al día como la inmensa mayoría de
los mexicanos, por lo que nadie les podrá decir “pobre político”.
Lo que veremos en los próximos meses será la guerra interna y todos
van a echar mano de los recursos que tienen a su alcance.
Ya están en campaña y más les vales no guardarse nada.
¿OPOSICION DESTEÑIDA?
Ciertamente si vemos a cada uno por su lado, el PRI no pinta, el PAN
tampoco y el PRD menos, pero ya demostraron que la unión hace la
fuerza y si consolidan la Alianza Opositora y logran convencer a
Movimiento Ciudadano de que se les una “para salvar a México”,
pueden hasta ganar la presidencia en el 2024.
Claro que primero tienen que limpiar la casa, sobre todo priístas y
panistas, cuyos dirigentes tienen muchos adversarios dispuestos a
quitarles el poder, y por eso Alejandro Moreno y Marko Cortes, tienen
que pensarlo muy bien antes de dar un paso definitivo.
Veremos.
EL PULSO.- Por cierto, quienes andan moviéndole el tapete a “Alito”
solo buscan mantenerse en la cúpula del poder, pero no están
dispuestos a sacrificar nada por el partido que tanto les ha dado. Los
ejemplos más claron son el senador Miguel Angel Osorio Chong y el
todavía gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat. No me imagino a
cualquiera de ellos encabezando el PRI en la contienda del 2024*** Y
qué tal si los militantes del otrora partidazo voltean para Yucatán y
promueven para presidente al senador Jorge Carlos Ramírez Marín,
quien además de ser un político de primer nivel, no tiene cola que le
pisen.
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