Las acusaciones infundadas realizadas el día de ayer por el candidato de Morena a la alcaldía en Miguel Hidalgo, Víctor Romo, referentes a un supuesto desvío de
Agregó que dichos señalamientos, a todas luces infundados, forman parte de una estrategia del ex delegado para tratar de desviar la atención sobre los señalamientos que pesan sobre él, respecto a actos de corrupción realizados durante su gestión al frente de la demarcación entre 2012 y 2015, que incluye el pago de recursos a proveedores por obras inconclusas o no realizadas.
A poco más de un mes de distancia para la elección de la primera alcaldía en Miguel Hidalgo, los sondeos y estudios de opinión realizados entre la población de la demarcación, muestran una tendencia favorable para nuestra abanderada, por lo que la desesperación de los dirigentes de la alianza electoral que respalda a Romo, los ha llevado a manipular de manera burda audios y videos de conversaciones sostenidas, dijo.
Es claro que Romo y sus operadores políticos, manipularon la conversación en la que se reiteró una oferta monetaria de 7 mil pesos mensuales por un trabajo de líder de brigada que se publicitó en los diarios El Gráfico y La Prensa los días 19, 20 y 21 de mayo pasados, y que forma parte de las opciones que los partidos políticos -en este caso el PRD- tienen para contratar personal en tiempos electorales.
El pedirle a la mujer en cuestión copias de sus comprobantes de domicilio, del CURP y de su credencial del INE, forma parte de los requisitos para postular al empleo y no para su inscripción en algún programa social, lo cual en ningún momento nuestros adversarios demuestran.
Además, de dicha conversación también se cortó el momento en el que se le pregunta a la mujer en cuestión si era beneficiaria o no del programa del seguro de desempleo, a fin de saber si podía desempeñar el trabajo o su situación lo impedía.
En cuanto a la llamada realizada a Jesús Suarez García, claramente se nota que es una llamada donde se busca imponer un tema diferente al de la conversación original, señalando expresamente que no existe coacción alguna.
Víctor Hugo Romo busca engañar a la opinión pública al aludir una presunta malversación de recursos provenientes de un programa operado desde la Secretaría del Trabajo, dependencia en la que hasta hace unos días estuvo al frente su mentora política, Amalia García, quien recientemente renunció a su cargo para incorporarse a las filas de Morena.
La mentira de Romo Guerra radica en el hecho que ni el Programa de Desempleo -al que aludió ayer en conferencia de prensa- ni ningún otro de los muchos programas que otorga el Gobierno de la Ciudad sin fines partidistas ni de lucro político ofrece a sus beneficiarios la cantidad de 7 mil pesos mensuales.
Por todo lo anterior, reitero que no hubo, no hay, y ni habrá ningún desvío de fondos de ningún programa del gobierno de la Ciudad para ninguno de las y los candidatos de nuestra coalición, y que dichos señalamientos forman parte del discurso de quienes incluso antes de que iniciaran las campañas en la Ciudad de México han venido alegando la existencia de un fraude electoral pero al mismo tiempo por conveniencia política se niegan a adherirse al Pacto de Civilidad propuesto por el Gobierno de la Ciudad y el Instituto Electoral de la Ciudad de México.
La fuerza de los votos en favor de nuestra candidata Margarita Martínez Fisher vencerá los infundios mediáticos a los que ha tenido que recurrir Víctor Romo por miedo a someterse al brazo de la ley que aplicará la Coalición Por la Ciudad de México al Frente a partir del próximo 1 de julio.
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