26
Fri, Apr

Presidente de la Comisión de “Diagnóstico del PRI”

Partidos politicos
C. Lic. Samuel Palma César
Presidente de la Comisión de “Diagnóstico del PRI”
P r e s e n t e.


Con toda atención me apresuro a responder a la convocatoria de mi Partido, a pesar de que dudo de la legitimidad de esa comisión que usted preside, pues la Presidencia del CEN está
C. Lic. Samuel Palma César
Presidente de la Comisión de “Diagnóstico del PRI”
P r e s e n t e.


Con toda atención me apresuro a responder a la convocatoria de mi Partido, a pesar de que dudo de la legitimidad de esa comisión que usted preside, pues la Presidencia del CEN está facultada para crear comisiones, organismos de naturaleza administrativa, y supongo que ustedes no solo tendrán tareas administrativas como señala el propio artículo del Estatuto que menciona el acuerdo; además, el propio Partido cuenta con todas las comisiones, el Consejo Político Nacional, la Comisión Política Permanente, la Comisión de Procesos Internos, la Fundación Colosio y aún la Comisión de Justicia Partidaria, que habiendo estado todas inmersas en el proceso electoral que acaba de concluir, es de estimarse, tienen mayores elementos para hacer un diagnóstico de lo que paso, que esta comisión de militantes distinguidos pero externos, para que le expliquen a los dirigente internos, que sí pudieron tomar decisiones, qué es lo que pasó en este desastroso proceso electoral para el PRI.

La conclusión evidente del diagnóstico debiera ser el que, quienes participaron en el proceso, rindan cuentas, informen de lo ocurrido; qué fue acertado y qué no lo fue, que utilidad tuvieron las secretarías, subsecretarias, coordinaciones, fundaciones, sectores, organizaciones etcétera; cuál fue su utilidad práctica o cuáles sus omisiones que nos llevaron al fracaso.

Rendir cuentas culmina el ciclo de la democracia, un Partido antidemocrático nunca rinde cuentas de nada. Creo que a los que participaron activa y formalmente del proceso les corresponde informar o responder a la militancia del suceso y, para esos efectos, me atrevo adelantar algunas preguntas que demandan una puntual respuesta:

1. Quién fue el autor de la idea y promotor del activismo del presidente Enrique Ochoa y sus colaboradores para permitir, por la modificación estatutaria, la postulación de un candidato externo postergando a quienes dentro del Partido buscaban la oportunidad de ser postulados.

2. Cómo seleccionaron al Dr. José Antonio Meade, para que él fuera el candidato externo del PRI y no otro.

3. Quién o quiénes fueron los que autorizaron y permitieron que la Declaración de Principios y el Programa de Acción del Partido fueran postergados frente a la serie de ocurrencias que el candidato ofertó en su incoherente discurso, durante toda la campaña.

4. Por qué la amplia estructura directiva del Partido, sus sectores y organizaciones no reaccionaron cuando en televisión nacional el candidato externo del PRI, calificó los logros de los gobiernos revolucionarios como "una película vieja que él ya había visto y que fracasó".

5. Por qué la dirigencia del Partido y sus fundaciones no ofertaron una plataforma del PRI en la campaña en la que se destacaran las instituciones de la vida pública, programas e instituciones de la vida republicana, construidos y defendidos por el PRI a través de los años.

6. Por qué la dirigencia del PRI con sus fundaciones, ni siquiera propusieron, en respeto a la Constitución, la posibilidad de la economía mixta, la rectoría económica del Estado en los procesos económicos del país, la construcción del Plan Nacional de Desarrollo y toda la magnífica literatura del PRI, elaborada en otras épocas brillantemente por el antiguo IEPES y la Fundación Colosio.

7. Qué pasó con los programas de activismo, Zafiro o de otras denominaciones que desconozco, que se desplegaron durante la campaña por el PRI, cuánto dinero se invirtió en ellos. Quiénes participaron exitosamente y quiénes no.

8. Cuánto gastó la Secretaría de Acción Electoral y cuáles son sus resultados.

9. Qué aportaciones concretas y medibles tuvieron el Sector Popular, la CTM y la CNC.

10. Cuál fue el método para seleccionar las posiciones de las listas plurinominales para el Senado y la Cámara de Diputados, y cómo decidieron para que en algunas de ellas, figurasen mujeres y hombres que apenas unos meses antes, no sabían de la existencia del PRI.

11. Por qué nunca, durante la campaña, sesionó el Consejo Político o la Comisión Política Permanente para corregir el rumbo o alertar cuando era evidente el pobre desempeño del candidato y de su campaña.

12. Quién decidió y por qué aceptó el PRI, que el vocero de la campaña fuera Javier Lozano, un personaje agresivo, grosero, traidor, cuya única identificación partidaria era con el PAN.

13. Por qué la coordinación de la campaña del PRI fue jefaturada por alguien que jamás en su vida ha competido por un cargo de elección popular de ningún tipo y carecía de experiencia en materia electoral, partidaria o en la conducción de campañas político-electorales.

14. Por qué, oficialmente, el candidato nunca acudió al Partido en demanda elemental de la memoria electoral del Partido, de su historia, de su acervo, de sus experiencias en más de 80 años de ganar elecciones de todo tipo, en todos los espacios del país.

15. Por qué la dirigencia del Partido y sus organizaciones quedaron prácticamente borradas durante la campaña, sin tomar decisión alguna que no pasara por la oficina del coordinador de la campaña o, supongo, que por del candidato ciudadano.

16. Cuáles fueron los beneficios durante la campaña o en los resultados por haber postulado a un candidato ciudadano y haber dejado la conducción de la campaña en otro ciudadano.

Por supuesto que hay más preguntas, por supuesto que estas son algunas de muchas otras que surgen y pueden surgir. Prepararé un documento con más detalle.

Como advertirá usted señor presidente de la “Comisión de Diagnóstico”, todas estas preguntas le correspondería contestarlas mejor, a quienes estuvieron en los puestos de dirección en todos sus niveles, que a un grupo externo como el que usted coordina, no tengo noticia de que hayan estado al frente de decisión alguna durante el proceso.

No dudo de su talento y de su capacidad, pero es de elemental sentido común, que aferrarse a los puestos y a los cargos cuando estos han construido un monumental fracaso, no puede ser una solución democrática, política y menos, digna.



César Augusto Santiago Ramírez
BLOG COMMENTS POWERED BY DISQUS